Que es... ¿la Oscuridad?

Muchos creen... que ya vieron lo que es la verdadera Oscuridad... pero yo no les creo... porque lo que yo e vivido... lo que mis ojos han presenciado... si... eso... eso si era la Oscuridad...

Me sentía solo... por muy abiertos que tuviera los ojos... solo veía la Oscuridad, camine durante horas en ese lugar, mis pasos no podían oírse y cuando corría tampoco.

Definitivamente no podía salir de allí... seria esto... ¿el fin de mis días?. ¡NO!

Nunca permitiría que la Oscuridad me parase por mucho que lo intentara a eso que escuche en mi oído derecho: "Los que se enfrentan a lo que no conocen solo les depara la eternidad... en la sombra..."

Rápidamente me di la vuelta y solo vi, un haz de luz casi invisible... incapaz de verse con claridad... pensé que era una ayuda, una mano que me echó alguien. Craso error. cuando entre en el haz y todo lo que vi a mi alrededor fueron Muertes, criaturas horrendas descuartizando a niños, bebes... familias enteras muriendo.

Quería salir de ese haz pero mis pies me lo impedían, y no sabia porque!.

Cerré los ojos, tenia miedo... y cuando los abrí solo vi otra vez oscuridad, a eso que un susurro volvió a mi oído "La luz no es mas que el miedo..." Renuncie a todo, pero cuando miraba al horizonte vi... vi una cuna, una cuna y en su interior había una carta en la que ponía con sangre, "¿¡LOS RECUERDAS!?" mi mente se vio inundada de recuerdos oscuros sobre la muerte de mi familia, mi hijo... mi esposa...

Solté la carta inmediatamente y corrí hacia ningún lugar para salvarme, tropecé con mi propios pies por el temor y en suelo, rompí en lagrimas de tristeza que podía oír, y rebotaban contra ninguna parte y volvían a mis oídos.

Cuando todo parecía silencioso, las siluetas de un niño, que se multiplico en veinte niños mas, me señalaron con un brazo escuálido y dijeron todos a la vez "Tu no nos ayudaste..." Tenia miedo, demasiado miedo. Huí de las siluetas hacia atrás pero las seguía viendo como me señalaban aunque siguiera caminando no dejaba de verlas, hasta que llegue a un punto en el que me rodearon y solo se me ocurrió arrodillarme y gritar "¡Porque me haces esto!".

Cerré los ojos... y cuando los abrí estaba en un prado de hierba... tumbado... y no sabia nada...

A partir de ese día mi vida cambio para siempre, ya que una experiencia como esta... te hace reflexionar muchas cosas.